PEELING QUÍMICO

El peeling químico es un tratamiento dermatológico que consiste en la aplicación de una solución química sobre la piel para exfoliar generalmente las capas más externas, promoviendo así la renovación celular. Este procedimiento ayuda a mejorar la textura y apariencia de la piel, tratando problemas como manchas, arrugas finas, cicatrices de acné y otras pequeñas lesiones. 

¿Qué tipos hay?

El peeling químico actúa removiendo las capas superficiales y/o medias de la piel mediante el uso de ácidos o enzimas que disuelven las células muertas. Dependiendo de la profundidad que alcance el peeling, se pueden tratar desde problemas superficiales hasta afecciones un poco más profundas. Para ello, existen tres niveles de alcance del peeling, que hace que se puedan diferenciar en tres tipos respectivamente: 

1. Peeling superficial:
   • Utiliza ácidos suaves como el ácido glicólico, salicílico o mandélico.
   • Es ideal para tratar problemas menores como la textura desigual, tono apagado o un acné leve.
   • Es un procedimiento suave con poca o ninguna descamación y que no requiere tiempo de recuperación.
   • Frecuencia recomendada: cada 2-4 semanas para obtener mejores resultados.
2. Peeling medio:
   • Utiliza ácidos como el ácido tricloroacético o concentraciones más fuertes de ácido glicólico.
   • Trata problemas más profundos como manchas solares, cicatrices leves de acné y arrugas finas.
   • Puede causar más descamación y enrojecimiento, con un tiempo de recuperación de 7 a 14 días.
   • Suele hacerse cada 3-6 meses, dependiendo de la respuesta de la piel.
3. Peeling profundo:
   • Utiliza agentes más fuertes como el fenol o concentraciones altas de ácido tricloroacético. 
   • Indicado para tratar arrugas profundas, cicatrices severas y manchas de sol más pronunciadas.
   • Es un tratamiento más agresivo, requiere incluso anestesia local o sedación y tiene un tiempo de recuperación prolongado (varias semanas).
   • Se realiza solo una vez, ya que su efecto es duradero.

El peeling químico es adecuado para muchas personas que desean mejorar la apariencia de su piel, pero no todas son buenas candidatas. Las personas con piel clara tienden a tener mejores resultados, ya que hay menos riesgo de hiperpigmentación post-tratamiento. Sin embargo, las personas con piel más oscura también pueden beneficiarse de peelings químicos superficiales o medios, siempre bajo la supervisión de un profesional capacitado.

Cómo funciona el peeling químico:

1. La solución se extiende uniformemente sobre el área tratada, que puede ser el rostro, cuello, manos u otras partes del cuerpo. Dependiendo de la concentración del ácido y el tiempo de aplicación, la solución química penetra en diferentes profundidades de la piel:
   • Peeling superficial: afecta solo la capa externa (epidermis).
   • Peeling medio: penetra en la dermis superior (segunda capa de la piel).
   • Peeling profundo: alcanza las capas más profundas de la dermis.
2. El ácido comienza a destruir las capas más superficiales de la piel. Esta exfoliación controlada elimina las células muertas y da lugar a una piel más nueva y saludable. La piel puede experimentar una ligera inflamación, seguida de enrojecimiento y descamación, lo que es parte del proceso de renovación.
3. A medida que las capas dañadas de la piel se exfolian, se estimula el proceso natural de renovación celular, promoviendo la regeneración de células nuevas. La nueva piel es generalmente más suave, con un tono más uniforme y mejor textura. Además, los peelings medios y profundos estimulan la producción de colágeno, una proteína clave para la elasticidad y firmeza de la piel, lo que ayuda a reducir arrugas y cicatrices.

No obstante, después de un peeling químico la piel pasa por diferentes etapas:

• Inmediatamente después del tratamiento: La piel puede estar enrojecida y sentirse tensa. Esto es una respuesta normal.
• Descamación: En los días siguientes, especialmente en peelings medios y profundos, la piel comenzará a pelarse o descamarse. Este proceso elimina la capa vieja y dañada de la piel.
• Reparación: A medida que la piel se cura, comienza a aparecer una piel nueva y más suave que es importante proteger del sol. 

Posibles efectos secundarios

• Enrojecimiento y descamación: son comunes y temporales, especialmente con peelings más profundos.
• Cambios en la pigmentación: En casos raros, el peeling puede causar hiperpigmentación (manchas más oscuras) o hipopigmentación (pérdida de color) temporal.
• Infecciones: En peelings profundos, hay un mayor riesgo de infecciones si no se siguen los cuidados adecuados.

Cuidados después del peeling

• Protección solar: Después del peeling, la piel se encontrará mucho más sensible y debe protegerse minuciosamente, ademas de que habiendo aplicado ácidos hay que tener extremo cuidado con la exposición al sol. Por ello, es crucial usar protector solar del más amplio espectro y evitar una exposición directa durante la recuperación.
• Hidratación: Mantener la piel hidratada con productos suaves ayudará a hacerla sentir más confortable, ya que dependiendo del tipo de peeling, la piel podría sentirse incluso tirante. De igual forma, debemos evitar ingredientes agresivos durante el proceso de curación.
• Evitar el maquillaje: Especialmente durante los primeros días se debe evitar el uso de maquillaje para no irritar la piel.
• Descamación natural: En los peeling en los que hay descamación, debemos permitir que la piel se renueve naturalmente de las capas que se están desprendiendo, no debemos forzar ni arrancarlas nosotros, para evitar cicatrices. 

En resumen, el peeling químico funciona eliminando las capas externas de la piel para promover la regeneración celular, mejorando la textura, el tono y reduciendo signos de envejecimiento. Dependiendo del tipo de peeling, el resultado puede ser más superficial o profundo, con tiempos de recuperación variables. Es un procedimiento muy efectivo para mejorar la piel, pero debe realizarse por un profesional capacitado, especialmente los peeling de nivel medio o profundo.